¿Lo sabías?

El término «cambio climático» se refiere a los cambios a largo plazo en el clima. Hay cambios causados de forma natural, pero desde el año 1800, las actividades humanas, han sido las principales causas del calentamiento global y del cambio climático.

Los gases de efecto invernadero actúan como una manta alrededor de la tierra, atrapando el calor del sol y aumentando las temperaturas.

cambio climático

El cambio climático ha provocado ya numerosas catástrofes naturales y constituye el problema medioambiental más grave de nuestro tiempo.

La industria del papel lleva décadas trabajando para reducir el impacto medioambiental de sus procesos, convirtiéndose en una de las industrias más sostenibles. La celulosa, su principal materia prima, procede de árboles cultivados y gestionados de forma responsable, por lo que es renovable.

Algunos ejemplos de gases de efecto invernadero que provocan el cambio climático son el dióxido de carbono y el metano. Proceden de la gasolina, el diesel, el gas y el carbón, utilizados como combustible en los vehículos, las centrales termoeléctricas y los procesos industriales.

Los árboles que se cultivan para la producción de celulosa eliminan el CO2 de la atmósfera, ayudando a combatir el cambio climático.

Al igual que los productos de la madera, el papel, la cartulina y el cartón mantienen el CO2 almacenado en sus fibras, a lo largo de su ciclo de vida. Por lo tanto, es muy importante reciclar estos materiales.

Dejar de utilizar el papel no salva los árboles, pero reciclarlo mantiene el carbono fuera de la atmósfera.

En los últimos 40 años, los bosques del mundo han contribuido a moderar el calentamiento global, absorbiendo aproximadamente 1/4 del dióxido de carbono emitido por las actividades humanas.

Los bosques desempeñan un papel fundamental en la mitigación de los niveles de CO2, pero reducir las emisiones es tan esencial como proteger los recursos forestales.

Fuentes:
United Nations, What Is Climate Change, 7 Aug 2021
The Soil Association, Sustainable Packaging Report: The case for paper, 2020