El centro tecnológico ITENE está trabajando, en el marco de un nuevo proyecto denominado BIOSURFINK, en el tratamiento de superficies y la formulación de nuevas tintas que permitan reducir el impacto medioambiental de los envases y embalajes, al facilitar la reciclabilidad y el compostaje del envase final.
Para ello, el proyecto BIOSURFINK, que cuenta con la financiación de la Conselleria d’Innovació, Universitats, Ciència i Societat Digital a través de la Dirección General de Innovación (enero- diciembre 2021), cuenta con dos vías principales de trabajo.
Por una parte, se están desarrollando superficies funcionales para aportarles nuevas funcionalidades como baja adhesión para fácil vaciado. De este modo, en línea con los requisitos europeos de economía circular, el tratamiento superficial impactará en el reciclado de los envases de manera que se podrá prescindir de barnices y recubrimientos y, además, se favorecerá al máximo el aprovechamiento del producto envasado.
Asimismo, en el proyecto BIOSURFINK se está trabajando en el desarrollo de nuevas tintas biobasadas con foco en la formulación de tintas para el desarrollo de productos sostenibles, mediante la formulación con pigmentos biobasados para la impresión de envases flexibles por flexografía. Adicionalmente, se están formulando tintas conductivas para impresión por inkjet con bajo coste e impacto en los materiales de envase, que servirán, además, como sistemas de trazabilidad y de autentificación de productos.
Estos desarrollos serán validados en materiales de packaging y en empresas que empleen técnicas de impresión como flexografía e inkjet, así como en empresas del sector de envase y embalaje, en concreto, en aquellas fabricantes de envases rígidos y flexibles destinados al sector de alimentación, cartoncillo y cartón destinado a sectores premium como cartuchería para productos de alto valor añadido, envase farmacéutico y embalaje para e-commerce.